Imagen: Timothy Schmalz
2016 Capítulo General de la Sociedad del Sagrado Corazón
Fue un gran sacrificio para Sofía permitir que Filipina y sus compañeras fueran al Nuevo Mundo, pero se dio cuenta de lo importante que era responder a las llamadas de la Iglesia y del mundo. Sofía comprendió que Filipina y sus compañeras habrían continuado a ser parte del solo cuerpo de la Sociedad. El Cor Unum se hizo más fuerte a través de su misión en otra parte del mundo y de la correspondencia entre Francia y el Nuevo Mundo. Aunque a menudo, Filipina tuvo que esperar meses antes de tener noticias de Francia, su lealtad hacia Sofía y la Sociedad la llevó a mantener el sentido de un solo cuerpo a cualquier precio, incluso cuando las decisiones contravenían sus propios deseos. Su humildad y su deseo de seguir al Espíritu le permitieron "dejar ir", para ceder a la opinión de los demás, pero cuando estaba en juego la unidad de la Sociedad, era inflexible.
Filipina tiene que estar muy contenta con la llamada del Capítulo a la unidad, especialmente cuando observa todos nuestros esfuerzos para responder a esta llamada en las circunstancias concretas de nuestras vidas. Que interceda por nosotras para que podamos crecer como un solo cuerpo, en nuestras relaciones recíprocas y con nuestro Dios, que nos llama a ser una sola mente y un solo corazón en el Corazón de Jesús.