¡El Capítulo General ha comenzado!

 

 
 
El Capítulo General de 2016 de la Sociedad del Sagrado Corazón
ha comenzado el 7 de julio
en el Centro Ad Gentes en Nemi, Italia.​ 

 

Tres momentos marcan esta apertura del Capítulo General: la conferencia de apertura, el ritual de llamar a cada capitular, y la Eucaristía de apertura.

 

 
1.  La conferencia de apertura
 
     
 
La Superiora General Kathleen Conan dio la bienvenida a las 78 capitulares más 2 miembros invitados, de 27 provincias, distritos o áreas y de varios servicios internacionales, quienes "durante las próximas cinco semanas reflexionarán juntas sobre la vida que hemos visto desplegarse y sigue desplegándose entre nosotras y alrededor de nosotras – su riqueza, su variedad, sus puntos vulnerables, retos y energía - [y] discernirán las llamadas que invitan a la Sociedad a vivir nuestra misión en el futuro que brota, un futuro que nos pide creatividad, valentía y la convicción de que el amor inmenso, tierno, fuerte y misericordioso de Dios irá configurando ese futuro."  
 
Tras subrayar las responsabilidades y el espíritu del Capítulo, como se indica en nuestras Constituciones, la hermana Kathy Conan invitó a las capitulares a reflexionar sobre las actitudes que nos piden: el actuar con el espíritu de discernimiento y de libertad interior, y el tener en cuenta el bien de todo el Cuerpo, yendo más allá de los límites de su propia provincia.
 
Ella nos recuerda que no estamos solas.  Continuamos un camino que nuestras hermanas de toda la Sociedad han estado recorriendo durante el año pasado; y estamos rodeadas por personas santas que han caminado delante de nosotras y estarán aquí muy presentes mientras trabajamos:  Sofía, Filipina, y Jesús, que ofrece a María y a nosotras el pan y el vino, que son alimentos para este viaje. 
 
Confiando en el Espíritu que nos llama y nos guía, la hermana Kathy Conan declaró abierto este Capítulo General de 2016.

 

2.  El ritual de llamar a cada capitular
 
 
Cada capitular fue llamada por su nombre:  "Cada una viene tal como es, enviada por nuestras hermanas, con sus cualidades y su manera personal de vivir nuestra vocación común.  Venimos con nuestras hermanas, con los pueblos de nuestras diversas culturas, representadas en las telas traídas de todas partes del mundo, paños que van a envolver, sostener, iluminar y configurar nuestro Capítulo."
 
Cuando la capitular respondió "Aquí estoy" en su lengua y pasó por la puerta de la sala del Capítulo, lo hizo muy conscientemente, comprometiéndose a asumir la responsabilidad que nuestras hermanas nos han confiado de buscar juntas, como cuerpo capitular, el camino que Jesús nos traza para vivir hoy el amor de su Corazón abierto, herido.  Al colocar su luz sobre el altar, cada capitular pidió al Espíritu las gracias que necesita para asumir esta responsabilidad.
 
Además de las capitulares hay unas treinta personas que nos ayudan de una u otra manera - rscj de varias provincias, nuestros colaboradores en el servicio a nivel general o en otros lugares.  Se unieron a las capitulares en el altar, y juntos rezaron:

Que nuestro deseo de ser mujeres de nuestro tiempo, cautivadas por el amor de Cristo, en el contexto de nuestras realidades cotidianas y abiertas a las llamadas del mundo, nos sostenga al emprender juntas este camino, y que la fuerza de la oración recíproca nos fortalezca.

Que el Espíritu que llevó a Sofía a ver las necesidades de su tiempo nos acompañe, para que podamos descubrir y discernir las orientaciones y decisiones a tomar para seguir viviendo la misión del amor de Dios hoy y en el futuro que está surgiendo.

(Carta de Convocación, 15 de febrero 2015)

 
3.  La Eucaristía de apertura
 
         
 
La liturgia de la Eucaristía, que comenzó con una invocación al Espíritu Santo, fue presidida por Adolfo Nicolás SJ, Superior General de la Compañía de Jesús.
 
A partir de las lecturas de la misa, el Padre Nicolás compartió sus reflexiones y destacó más la obra del Espíritu en un Capítulo. Algunos ecos:

Cuando nos abrimos el uno al otro, nos damos cuenta de que hay fuego en medio de nosotros.

Como María, se nos invita a ser contemplativa y aprender de lo que oímos de los demás.

El Espíritu nos anima a abrirnos a algo más grande que nosotros mismos.

Es evidente que la obra del Espíritu va más allá de nuestra imaginación y nuestra experiencia.

No venimos a un Capítulo General para que nuestra cultura sea conocida. Queremos ir más allá de nuestra cultura. Queremos ir donde el Espíritu nos está esperando.

Queremos ir más allá, y esto más allá sabemos que es el evangelio, y el evangelio nos va a llevar hacia lo que no podemos imaginar, más allá de lo que podemos experimentar.

Terminó diciendo que un Capítulo "requiere una gran cantidad de oración". Si no se hace a través de la oración, un Capítulo no tendría "la profundidad, el poder convincente que queremos que tengan nuestros Capítulos."

Haga clic aquí para ver el video de la Eucaristía de apertura.​

 
Terminamos este resumen con las palabras de la Conferencia de apertura:

Dios nos acoge en este Capítulo con gratitud, agradece que vengamos con espíritu abierto y deseo de ver juntas cómo ser el corazón de Dios para el mundo en el futuro que brota.

Jesús es la puerta por la que entramos en el Capítulo, Él es el único que nos ha llamado a esta vocación y cuyos pasos queremos seguir cada vez más de cerca.​

Entramos en esta sala capitular con la confianza de que el Espíritu nos precede y nos guía.  Sostiene nuestro carisma y nuestra misión, que serán la referencia de todo nuestro trabajo. Vive en cada una de las capitulares con quienes vamos a compartir esta trayectoria.​

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