Pascua 2019
Queridas hermanas y familia del Sagrado Corazón:
A través de este breve mensaje les enviamos nuestro saludo desde Egipto, conforme nos adentramos en el misterio de la vida, muerte y resurrección de Jesús. Este año deseaba escribirles una carta para Pascua, en particular a la luz de nuestra búsqueda común para encontrar nuevas formas de avivar la llama de la misión y para alinear más nuestros sueños con el sueño de Dios para toda la creación. Para ser honesta, nuestra inmersión en África – la vida de nuestras hermanas y de sus pueblos, así como la experiencia abrumadora de una desigualdad económica tan tremenda y de la complicidad global en el pecado social y en el sufrimiento – me ha impedido encontrar tiempo y espacio para escribir algo profundo.
Quiero dar las gracias a los más de 300 grupos que han reflexionado ¿Quién nos llama Dios a ser? y ¿qué nos llama Dios a hacer? y que han presentado al Equipo Atrapa-sueños sus esperanzas, sueños y desafíos. Recemos juntas para que la sabiduría del Espíritu ilumine a los cinco miembros de este equipo: Núria O’Callaghan (ESP), Nancy Durand (PER), Margaret Mwarili (UGK), Patricia D'Souza (IND), Genelle Stock (ANZ) y Erick Odmark (Consultor de USC), que empiezan a adentrarse en el significado y en las intuiciones de las reflexiones que han compartido. El Equipo Atrapa-sueños se reunirá con nosotras en Roma a finales de mayo para ayudarnos a establecer los próximos pasos en preparación del Capítulo Especial.
Desde cualquier lugar del mundo donde estemos, unámonos en la oración para que el acto supremo de amor de Jesús, que entregó su vida por el bien de la misión del Padre, penetre en nuestros corazones. Qué el amor de Jesús nos transforme y nos done la misma esperanza y energía que María sintió al encontrar a su Amado, y que la impulsó a salir para compartir la buena noticia de que Jesús había resucitado y de que una nueva vida era posible.
Con cariño y oración,
Barbara rscj
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