María Gallardo del Colegio Godella (Valencia)
En el próximo número de Latidos, la revista de la provincia de España, la provincia publicará algunos artículos sobre la transmisión del carisma de Magdalena Sofía Barat que la Fundación educativa Sofía Barat hace a través del Curso online de educador del Sagrado Corazón.
Hoy, yo me siento parte del suelo de Magdalena Sofía, y en mi día a día con los alumnos intento transmitir esa mirada que se nos descubrió en el curso; una mirada profunda que llega a cada alumno, no para ser evaluado sino para ofrecer a cada uno lo que necesita.
Desde mi tutoría y desde mi participación activa en pastoral intento dar sentido a su legado dándome a cada alumno desde la fascinación que me produce leer “…es más importante iluminar la mente de la alumnas que señalar sus errores” (1874) o “…buscar lo que más ayude a la inteligencia” (1852) y preguntarme ¿no es esto la base de la innovación educativa? Al leer los diferentes planes de estudios descubro que nuestra fundadora fue una de las más grandes innovadoras educativas que hemos podido tener.
Yo quiero ser llama de fuego para cada uno de mis alumnos. Y, pienso que si consigo que sólo uno de ellos me recuerde como un ejemplo a seguir, habrá valido la pena.
María Gallardo
Colegio Godella (Valencia)
Lo que he descubierto haciendo este curso amplía el conocimiento que tenía de Sofía. Cuando hice el curso como alumno, descubrí una imagen de ella más humanizada y realista, de una mujer con una gran fuerza y determinación, que afrontaba las dificultades que iban surgiendo, con un gran corazón, cercana a las personas, con un gran amor por Jesús, y siempre fiel a su intuición fundamental.
Este año se me ha ido perfilando con más claridad su dimensión contemplativa y su interioridad. Esta mirada de Sofía de la realidad del mundo, de la humanidad que sufre, "yendo del corazón traspasado de Cristo, al corazón traspasado de la humanidad", que surge de su interior, la lleva a la acción y se concreta en la misión: el anuncio de la Buena Nueva de Jesús de Nazaret.
Ferran Torelló
Colegio Diputació (Barcelona)
Sofía Barat quería desarrollar ya de aquella manera en sus alumnas el sentido y el gusto por la reflexión, que fuesen conscientes de la realidad que les rodeaba y supiesen analizarla con un espíritu crítico para así poder cambiar poco a poco el mundo. Esta idea sigue muy en auge en nuestros días. No es fácil analizar nuestra realidad con la multitud de estímulos que se nos presentan. Por ello es tan importante la forma de educar el espíritu crítico que tenemos en los colegios de la Fundación Educativa Sofía Barat. Debemos hacer que nuestros alumnos/as sean también capaces de desarrollar esa capacidad de análisis y reflexión del mundo tan complicado que nos rodea hoy en día y del que se hace urgente cambiar algunas cosas, tal y como lo hizo en su momento Magdalena Sofía Barat y siempre acompañados del amor al Corazón de Jesús.
Patricia Argibay
Colegio Placeres (Pontevedra)