Condecoración de la Orden de Isabel la Católica concedido a Adela Blanes RSCJ

Adela Blanes rscj (EGY) con el Embajador de España en Egipto

El viernes 7 de noviembre nos reunimos varias rscj, amigos/as con el Embajador de España en Egipto, el Señor M. Arturo Avello Díaz del Corral. El Rey de España, Felipe VI, concedía la condecoración de la Orden de Isabel la Católica a la Hermana Adela Blanes para agradecerle su trabajo a favor de la promoción y desarrollo de la mujer, sobre todo en la lucha contra la ablación del clítoris de las niñas, el matrimonio en edad temprana y los derechos de la mujer.

El Señor Embajador, en su discurso, dijo que Adela representaba el trabajo de muchas religiosas españolas del Sagrado Corazón que han dado su vida y su vocación al servicio de Egipto . Subrayó el amor, la ternura, la confianza, el compromiso y la solidaridad en la misión que se les había confiado : la educación en el Colegio de Ghamra con Pilinchi Romero y Asunción López. Y el trabajo en los Dispensarios y con las chicas de Samalout, de Reyes Callís y Juanita Rivero

Adela, brevemente, dijo que recibía esta condecoración en nombre de todas las religiosas del Sagrado Corazón y de los seglares que han colaborado con ella en esta misión de educación y desarrollo de la mujer del pueblo de Bayadeya : Cecilia van Zon, Celeste Khayat, Sally Salah, las monitoras del Centro de Chicas, las hermanas de la Congregación  que le han ayudado y apoyado en esta misión, la Asociación pro educación y desarrollo del Alto Egipto, representado por su Presidente emérito M. Amin Fahim y su actual Presidente M. Antoine Labib. Subrayó la herencia recibida de la fundadora Santa Magdalena Sofía: «mujeres impulsadas por el amor del Corazón de Jesús para entregarse a la educación buscando hacer crecer a la persona en su dignidad humana y de hijas de Dios, educándolas en libertad, amor y respeto y justicia para que tengan una calidad de vida mejor y contribuir así a la construcción de un mundo más humano.«

Adela después de agradecer al Rey Felipe VI la condecoración terminó con las palabras del Obispo catalán que vive en el Brasil desde hace muchos años, muy comprometido con la teoogía de la Liberación : al final de la vida me preguntarán : ¿has amado? Y entonces, abriré mi corazón lleno de nombres. Adela añadió

«Estoy cerca del final de mi camino. El Señor me ha hecho el regalo de tener el corazón lleno de nombres y de rostros de hombres y mujeres, de niños y niñas del pueblo con los que he compartido alegrías y penas, esperanzas y dificultades. He aprendido de ellos a dar mi vida para que otros la tengan, a vivir en solidaridad con el dolor y el gozo, a entrar en el Misterio del Corazón herido de Jesús….  Hermanas de la vida religiosa que me han ayudado y sostenido, amigos y amigas que han colaborado con generosidad al desarrollo y al bienestar de las personas… Mi corazón agradece a Dios por tantos nombres y rostros … mi vida se ha enriquecido al compartirla con ellos… Mi gran fuerza y mi alegría a lo largo de estos años ha sido mi encuentro diario y personal con Jesús: Todo lo que hacéis a uno de esto mis hermanos, a mí me lo hacéis. Lo que cuenta en la vida es Amar, amar, amar …
 
Gracias por vuestra presencia a todos los que de lejos o de cerca habéis querido compartir conmigo este acontecimiento.»

Al final un brindis nos ha unido en la alegría y la amistad.

 
Reportaje y fotos enviadas por​ Aida Ghali rscj
 

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