La Venerable Cornelia Connelly, quien fundó la Sociedad del Santo Niño Jesús en el 1846, vivió en Gran Couteau, Louisiana entre 1838 y el 1843. Aunque vivió en Grand Coteau solo cinco de sus 70 años, este sigue siendo uno de los momentos clave de su vida.
Cornelia, con su esposo Pierce y sus tres niños, se estableció en Grand Coteau, donde enseñó en la Academia del Sagrado Corazón, y Pierce sirvió en la facultad del Colegio Universitario de Saint Charles. A pesar de las circunstancias difíciles y de sus importantes privaciones, crearon una vida familiar alegre y su fe católica creció. Cornelia hizo su primer retiro espiritual y reconoció que “la conversión se había cumplido”. Los miembros de la familia la visitaron, incluso la hermana de Cornelia, Mary Frances Peacock, que permaneció con ellos y fue recibida en la fe católica. Pierce describió una vez a Cornelia como “más feliz que una perdiz” en esta comunidad remota y rural.
El tiempo de la familia Connelly en Grand Coteau no fue sin tragedias. En julio del 1839, su cuarta niña, Mary Magdalen, murió de una enfermedad seis semanas después de su nacimiento. Siete meses después, en febrero del 1840, su tercer hijo, John Henry, murió de quemaduras después de una caída accidental en una tina de azúcar hirviendo. Cornelia abrazó a su hijo durante 43 horas, hasta su muerte. Mary Magdalen y John Henry están enterrados juntos en el cementerio de Saint Charles Borromeo en Grand Coteau.
En el otoño del 1840, la llamada de Pierce al sacerdocio católico se intensificó. El 13 de octubre, Pierce, mientras caminaba con Cornelia por Oak Alley en el campus de las Hermanas del Sagrado Corazón, anunció su intención de convertirse en sacerdote católico. En ese momento, Cornelia estaba embarazada de su quinto hijo. Le pidió a Pierce: “piénsalo dos veces y con mucha atención, pero si el buen Dios pide el sacrificio, estoy lista para hacerlo a Él y con todo mi corazón”.
Durante este tiempo, la hermana de Cornelia, Mary Frances, también contemplaba la vida religiosa. En 1841, Mary Frances entró en la Sociedad del Sagrado Corazón en Grand Coteau.
En mayo del 1842, Pierce, con su hijo mayor, Mercer, viajó a Inglaterra, donde Mercer se inscribió en un internado. Desde Inglaterra, Pierce viajó a Roma, Italia, para entrar en el sacerdocio. Cornelia se trasladó al Bishop’s College, una casa en la propiedad de las Hermanas del Sagrado Corazón en Grand Coteau y continuó enseñando en la Academia del Sagrado Corazón. En el Bishop’s College, Cornelia tenía permiso para participar en todos los ejercicios religiosos con las Hermanas del Sagrado Corazón.
En el verano del 1843, Cornelia dejó Grand Coteau y viajó con sus dos hijos menores, Adeline y Frank, a Roma, donde aceptó la separación de Pierce y una vida de castidad.
Más tarde en la vida, Cornelia reflexionó que fue en Grand Coteau donde la Sociedad del Santo Niño Jesús fue fundada sobre un «corazón roto».
Para recordar y honrar el tiempo de Cornelia en Grand Coteau, en el verano del 2020, la Sociedad del Santo Niño Jesús instaló un banco y una placa con su nombre y las fechas importantes y plantó un árbol en la propiedad de las Hermanas del Sagrado Corazón.
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