Esta pintura de Nuestra Señora de los Dolores está en la Villa Lante en Roma. Magdalena Sofía rezaba de manera especial a Nuestra Señora de Dolores durante los momentos críticos de la Sociedad del Sagrado Corazón en el año 1839.
La Oración de Magdalena Sofía
a Nuestra Señora de los Dolores
Oh María, Madre de dolor y de amor,
con el corazón lleno de agradecimiento
y amor por las gracias que habéis derramado
sobre esta pequeña Sociedad,
venimos a reconocer solemnemente
que ella debe todo a vuestra protección maternal
y a los méritos de vuestro corazón traspasado.
Terminad vuestra obra, oh divina Madre,
y tomad Vos misma la dirección de nuestras almas
y de todas las que vendrán a la Sociedad
para servir al Corazón de Jesús.
Hacednos dignas de su Corazón adorable
por la imitación de las virtudes de vuestro corazón
que es la más perfecta imagen.
Concedednos la fe viva, la humildad profunda,
y el valor que nos eleven por encima del sufrimiento
y nos hagan como a Vos, permanecer inmóviles al pie de la Cruz.
El amor Vos dio la Cruz;
que la Cruz nos dé el amor;
y que no exista nunca otra cruz
para las Religiosas de Sagrado Corazón de Jesús,
sino la Cruz de Jesús.
Que la Cruz de Jesús sea nuestra seguridad,
su muerte nuestra confianza y nuestra fuerza,
su gracia nuestro sostén.
Madre Dolorosa, sed siempre la guía,
la protectora de esta pequeña familia....
Cada una de nosotras ratifica por sí misma
esta consagración sin reserva.
¡Somos totalmente vuestras....!
(Texto de los Archivos Generales, Roma)
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