Oración de agradecimiento a Magdalena Sofía por la fundación de la congregación

  • Oración de agradecimiento a Magdalena Sofía por la fundación de la congregación

Esta oración fue escrita por una RSCJ, que agradece a Magdalena Sofía el regalo que nos hizo al fundar la congregación; un generoso regalo de lo que ha realizado, pero sobre todo por lo que es y lo que nos ha transmitido.

"La vida religiosa es un don que la Iglesia ha recibido del Señor"

(Lumen Gentium 43)

Oración

"La vida religiosa es un don para la Iglesia...

Tu vida, Santa Madre, es un don para la Iglesia.

Un don que se nos ha dado... todo gratis.

El don de lo que has logrado, sin duda...

Pero más bien el don de lo que eres...

Los años de tus primeras fundaciones, esos años marcados por las características de tu juventud,

nos los das a nosotros:

con la audacia creativa de tus comienzos en un mundo tan problemático y difícil como el nuestro;

con el espíritu místico que te hacía vibrar al leer el Cantar de los Cantares;

buscar el encuentro de tu corazón con el Corazón de Cristo y dejarnos, como un tesoro insustituible, este signo del Corazón;

con tu capacidad para la amistad, para esas amistades cálidas y atentas, fieles y llenas de espontaneidad;

con ese toque de fragilidad, esa tenue apariencia de quien es visitado la enfermedad, un cierto temor a la responsabilidad, y un gran asombro ante las pequeñas cosas.

Tus largos años de madurez son también un regalo para nosotros:

esos años de perseverancia en la búsqueda, en medio de organizaciones y las luchas,

de fracasos y retiros, de preocupaciones persistentes, de deudas y medios limitados...

estos años de constantes ajustes. Ajustes:

a la gente: 14.000 cartas son prueba de ello,

a la historia, con sus revoluciones y sus evoluciones,

a los países: Europa ya te invitaba a cruzar las fronteras al Nuevo Mundo,

donde te hubiera gustado unirte a Filipina, a quien habías dicho: "Vete".

Y entonces, Dios quiso que nos dieras también los años de tu vejez,

los de la acción de gracias asombrada,

los de la sabiduría que relativiza y perdona,

los de la retirada serena permitiendo que otras manos tomen la antorcha...

Todo esto es un regalo para nosotros.

Un regalo que se me ha dado... libremente...

¡Amén! ¡Gracias!

Una RSCJ