



¿Vienes con gusto al taller? ¿Por qué?
Está bien que disfrutes haciendo disfrutar a las Hermanas. ¿Tú aprendes algo que te hace bien a ti?
Un padre de familia las acompaña (las chicas son menores y están fuera del recinto escolar). Le preguntamos: ¿No perturba tu horario acompañar a estas jóvenes durante dos horas un día por semana?
"Al revés, es un rato importante y deseado. La educación al respeto, al interés por el otro, el débil, es parte fundamental de la formación que buscamos para nuestros hijos. Disfruto viendo sus ocurrencias, cómo buscan lo que puede divertir a las Hermanas. Este rato es un pedacito de cielo en mitad de mi trabajo; al salir de aquí vuelvo a sumergirme en otro ambiente mucho más árido. Esto da alegría. Mi madre, mi mujer, mis hermanas son antiguas alumnas: ¿te figuras la deuda de gratitud que tenemos hacia el Sagrado Corazón?"