Una conferencia para celebrar nuestra misión e internacionalidad

Desde que llegamos al Colegio del Sagrado Corazón en la Ciudad de México, hasta el momento en que partimos, cada uno de los que participamos en la V Conferencia Internacional de Directores del Sagrado Corazón fuimos recibidos con los brazos y el corazón abiertos. El saludo entusiasta de las niñas, sus bailes y la sonrisa con que nos saludaban, el momento en que nos pidieron ponernos de pie a cada uno de los países, hicieron tangible el sentido de comunidad compartida y de internacionalidad que siguieron floreciendo durante el desarrollo de la conferencia.  

El cuidado en la planeación pudo verse en el programa: conferencistas que nos inspiraron y desafiaron, grupos diseñados para permitir el diálogo entre distintas naciones y lenguas, ayudadas por la excelente traducción, así como tiempos de oración y reflexión en silencio, de forma creativa y con movimientos, para enfocar nuestra mente, cuerpo y corazón. Me impresionó cómo todo esto nos condujo al objetivo de prepararnos para diseñar orientaciones comunes para nuestros jóvenes. En total éramos 120 delegados de 49 colegios y 19 países, así que era todo un reto, ¡especialmente para la comisión que traducía, sintetizaba y procesaba nuestras ideas!

Esta atención en el detalle se refleja en la increíble hospitalidad que se nos dio: las comidas, visitas, transporte, descanso, la inmersión en la historia y cultura de México así como la celebración de la diversidad de nuestras culturas que pudimos vivir en la Eucaristía final. Todo fue vibrante, lleno de colorido y lleno de vida y cariño.

             

 

“Quedé abrumada por la diversidad de la Sociedad y sus colaboradores laicos,

representando a tantos países y trabajando juntos. 

Otra cosa que me tocó fue la alegría que viene de la gratitud.”

 

Jackie Brown                                                   

^{Directora de Digby Stuart College, Universidad de Roehampton}                                                                    

 

 

Al volver a nuestros lugares, hay palabras e ideas que resuenan en nuestros corazones. De Pilar, la invitación a ser guardianes de la llama para el “mar de fueguitos” que tenemos delante, reflexionando la realidad a la luz del evangelio. De Jorge y Juan Luis, ser conscientes del contexto y del mundo de nuestros alumnos. De Mariola, las cualidades que debemos modelar y animar en los jóvenes. De Georgina, una comprensión más plena de nuestro carisma y cómo el Corazón de Jesús lo toca todo. Hubo excelentes ejemplos de prácticas, como el diplomado en línea que tienen en México, o la presentación de Hiroko sobre la Sociedad. Y por supuesto, el intercambio entre nosotros.

 

 

 

          

 

“Para mí, la impresión más perdurable fue

la fuerza y dinamismo del carisma del Sagrado Corazón.”

 

 

Sharon O'Donovan                                                  

^{"Deputy Head Teacher," Colegio del Sagrado Corazón, Hammersmith, Londres}                                                                  

 

Hubo risas y conversaciones, fortalecimos antiguas amistades e hicimos otras nuevas, nos conectamos. Se sembraron oportunidades para desarrollar nuevas conexiones entre nuestras redes, colegios y con AMASC. Eventos como éste son momentos preciosos y privilegiados que ayudan a nuestra misión. Nos dan raíces y nos elevan, nos fortalecen y nos acercan a nuestros compañeros laicos, las RSCJ y Dios. Estoy profundamente agradecida con quienes hicieron posible estos días.

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