La colaboración es al mismo tiempo ser y hacer y se realiza en la reciprocidad. Respeta la dignidad de las personas y de los pueblos, acoge y comparte lo que cada uno es y ofrece.Nos pide actitudes de confianza y apoyo mutuo, de vulnerabilidad y apertura, capacidad para aprender del otro, flexibilidad e imaginación para descubrir juntos nuevas posibilidades.Nos lleva a formar equipo, a delegar y a ser corresponsables del bien común; a elaborar proyectos comunes y a desarrollar juntos nuevos procesos en nuestro servicio de educación.Capítulo General 2000